Tipos de Lesión - ATL Fisioterapia y Pilates

Las lesiones se dividen en tres tipos diferentes según su grado de afección muscular.

  • Las contracturas o espasmos son características de músculos que durante tiempos prolongados sufren sobrecargas, o pueden aparecer incluso por estrés. El músculo se muestra acortado, y en su palpación podremos encontrar “puntos gatillo” o zonas de dolor puntuales.
  • Las distensiones o elongaciones se producen cuando el músculo se ha sometido a un estiramiento forzado o se ha llevado a un esfuerzo superior a su capacidad. No hay lesión en las fibras, por lo que no habrá hematoma ni equimosis. Lo que sí observaremos en su palpación son bandas tensas en el vientre muscular. Se suele manifestar como un “pinchazo”, siendo los isquiotibiales, recto anterior del cuádriceps, aductores, gemelos y sóleo las zonas más propensas a este tipo de lesión.
  • En las roturas musculares o fibrilares existe una ruptura parcial o total en el músculo. La principal causa suele ser la ausencia de calentamiento antes del ejercicio intenso, un desequilibrio entre músculos antagonistas, o incluso las condiciones externas como frío y/o humedad. Se suele manifestar con lo que se conoce como “síndrome de la pedrada”, ya que el paciente tiene la sensación de haber recibido un fuerte golpe en la zona afectada. En este caso sí que hay afectación en las fibras musculares, apareciendo hematoma y equimosis por la hemorragia muscular. Dentro de este tipo de lesión hay diferentes grados según la separación en milímetros o centímetros entre los extremos de la fibra muscular rota.

¿Qué podemos hacer para su prevención, o tratamiento cuando ya se ha producido la lesión?

  • En el caso de las contracturas lo adecuado es calentar antes del inicio del ejercicio físico, y realizar un completo estiramiento a su finalización. Si se ha producido la lesión lo mejor es aplicar calor local, efectuar masajes, tratamientos con punción seca, estiramientos con frío, etc.
  • El tratamiento inmediato cuando se produce una distensión o elongación es aplicar frío en la zona. Cuando hayan pasado tres días podremos comenzar fisioterapia con masajes de descarga, estiramientos, y sobre todo reposo para no empeorar la lesión.
  • Para prevenir una rotura muscular descargaremos la musculatura con estiramientos y masajes. Pero cuando se ha producido la lesión afrontaremos la recuperación según el grado. Durante los primeros días se aplicará frío para evitar la inflamación, se harán vendajes compresivos, y se hará un riguroso reposo. Pasados unos días se podrán hacer masajes de descarga, estiramientos controlados, contracciones isométricas… incrementando este tratamiento durante un tiempo. Pasado un periodo prudencial de recuperación se iniciarán ejercicios de fuerza para recuperar el músculo por completo.

Una buena idea es ponerte siempre en manos de tu fisioterapeuta de confianza para la prevención de lesiones, o la mejor recuperación si ya se ha producido. En ATL Fisioterapia y Pilates estamos a tu disposición, porque nos preocupa tu salud y bienestar.

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